sábado, 29 de marzo de 2014

La tierra larga

Título original: The Long Earth
Autor: Terry Pratchett, Stephen Baxter
Editorial: FANTASCY
Fecha de publicación: 2012
ISBN: 9788415831112
Número de páginas: 464
Género: Ciencia Ficción, Fantasía


“Otros mundos nos esperan. Basta con dar un pequeño paso…”


¿Qué sucede cuando te acercas a un libro con una expectativa alta? Lo odias ¿Qué sucede cuando te acercas a un libro de Terry Pratchett con una expectativa alta? Oh, es maravilloso.

No conozco a Stephen Baxter y considero una gran falla ingresar a su literatura por medio de otro autor y mucho peor a través de Terry Pratchett. Cuando leí Buenos Presagios ya había leído mucho de Pratchett y también de Gaiman y eso hubiera sido lo apropiado en este caso también. Pero es imposible encontrarse con un libro de Terry y no comenzar a leerlo. ¿Por qué lo digo? Ahora que he leído tengo un concepto contaminado (no en el mal sentido) de la obra de este autor y me da miedo pretender algo mayor a lo que él esté dispuesto a dar e infravalorarlo por eso.

Este libro huele a Pratchett de principio a fin, basta mirar la cruzadora y fijarnos en esa patata para saber que él lo ha escrito. Hasta me acuerdo de Rincewind.


Al principio la historia se presenta con cierta incertidumbre, hasta se podría pensar que quería encajar en el misterio. Algo de misterio también tiene toda la obra, pero no es por ahí por donde va. Hay una pequeña cosa que no termina de resolver Pratchett ni Baxter, y es lo absurdo que resulta que Joshua quede solo en un ‘universo’ su madre en otro y aún así ni siquiera se haya cortado el cordón umbilical. Que alguien me explique como es esto posible, porque yo no termino de entenderlo.

Con respecto al otro misterio el que persigue buena parte del libro sólo comento que. Revisando las notas marcadas durante la lectura del libro, me he quedado boquiabierta, la respuesta estaba allí desde el principio, Pratchett o será Baxter, lo ponen. No le dedican ni diez líneas al asunto, pero está allí. ¿Por qué son tan crueles?

Algo que tienen todos los libros de Terry Pratchett es la profundidad filosófica que se les puede dar. No conozco a Baxter por eso no me refiero a él, lo siento. Pero como puntualizaba todos y cada uno de los libros de este británico tienen una fuerte carga filosófica. Aún desde la literatura y a pesar del humor con el que va tratando tan variopintos temas los termina llevando al campo de pensamiento filosófico y esta novela no se queda atrás. Hay un cuestionamiento del ser humano, de a dónde va o a dónde pretende ir, su origen o su definición misma. Qué es aquello que lo mueve a existir y como considerar existencias similares y también la posibilidad de una existencia superior. Y como siempre el autor da una tentativa respuesta, una respuesta desde el campo de la ficción, que puede resultar el primer pasó para generar un debate al respecto.


Hace muchos guiños con respecto a otras obras literarias y a elementos varios arraigados en la cultura popular (y no tan popular). Es decir, es otro libro más de Terry Pratchett, pero también como todo libro de Pratchett es una reinvención del autor, lo cual te mantiene enganchado por la novedad del asunto.

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