¿Por qué escribo?

Creo que esta entrada debí crearla cuando inicié el blog, pero tal vez en ese momento no me planteé porqué lo hacía, sino que simplemente lo hice (y eso que yo no soy de impulsos, aunque parezcan impulsos me planteo muy bien las cosas), o tal vez  (lo más probable) inconscientemente lo vi necesario y conscientemente sólo lo hice.

En una ocasión conversando con unas amigas salió a discusión el tema de los blogs. Una de ellas comentó “¿para qué tener un blog si no tiene seguidores?”, y en voz un poco más baja completó "pero yo tengo uno que nadie lee". Por lo que se puede decir, que los seguidores es algo anexo al blog, no es objetivo de un blogger conseguir seguidores.

Cuando era pequeña y veía en la televisión que alguna película era clasificación C (para público con criterio formado).Obviamente, mi madre me decía que no podía verla. A lo que yo le contestaba. “Yo tengo un criterio formado, lo que digan o hagan allí no va a cambiar mi manera de pensar o actuar, por lo que sí puedo verla.”

Y así como considero tener mi propio criterio frente a muchas cosas (que no todas, porque no somos omniscientes) también me gusta compartirlas. A pesar de que cuando conozco a una persona soy muy callada y me cuesta iniciar y mantener una conversación. Quienes me conocen pueden decir que con el tiempo eso cambia y que si es un tema que me interese puedo mantener largas pláticas, y no sólo un intercambio de información sino también compartir criterios.

Y es que estoy en la oficina, en la calle, viajando en el carro, viendo la televisión, leyendo el diario, navegando en internet (etc.) y mi mente en seguida piensa "que interesante tengo que compartirlo", o "no estoy de acuerdo con él/ella con respecto a eso"

Es que el mundo a nuestro alrededor, se mueve, cambia, está vivo. Hay tantas cosas que suceden que excitan la mente produciendo ideas y críticas y tengo la necesidad de expresar mi opinión sobre ellas. Muchas veces los foros no son suficientes. Y por eso nació este blog y se mantiene.