sábado, 23 de octubre de 2010

Planes, planes y más planes

A veces me gustaría sentarme y poder decir “Y ahora, ¿qué?” quedarme un momento sin nada que hacer, tomar un cuaderno y un lápiz y comenzar a planear que es lo que haré, que surjan ideas e imaginarme haciendo esas cosas.
Pero la realidad es distinta, no es que no se me ocurra nada, por el contrario tengo una lista de planes, que si me tomara un año de vacaciones para llevarlas a cabo seguro que me faltarían cosas por hacer, ¿será acaso que soy muy ambiciosa? Tal vez sea eso, por eso que me siento tan Slytherin.
Hay un poco de libros que tengo pendientes por leer, solo con mencionar la saga del mundodisco, tendría para leer un par de meses sin parar, son más de veinte los traducidos al español, y yo me quedé por el catorce o el dieciséis (mejor ni reviso los datos sino descubro que son más los que me faltan). Desde mi estantería me observan cuatro libros diferentes con separadores, y uno que ni ha sido tocado, que se unen ansiosos a la lista de pendientes.
Tengo en una carpeta que se llama “blog” algunos archivos de Word a medio comenzar, algunas entradas terminadas que no he publicado porque han sido escritos y no he checado su ortografía, y creo que también hay al menos un par de listas con ideas de contenidos.
Lo mismo sucede con mi club de HL sé que tengo un documento de varias páginas con el contenido del club, algunos a medio redactar, información que ya debería de haber subido. Bocetos del diseño y unas ideas sueltas.
Y yendo a algo más “artístico” tengo tres ilustraciones que están prácticamente terminadas, a una le falta poner color, otra montar el fondo y a la última los retoques finales. Un cuaderno que me acostumbré a llevar que tal vez algún día digitalice. Muchas más ideas en mente y creo que algunas ya hasta comenzadas.
Y así podría llenar páginas, pero para resumir quedan mis proyectos de narrativa y unas manualidades de las que tengo comprado el material. Sólo de pensar en todo me abruma seguro que estoy dejando mucho de lado.
El día debería tener al menos unas cuarenta y ocho horas y mi trabajo debería ser de medio tiempo (con la misma paga, al menos) y debería de darme menos sueño. En el contrario de los casos debería de conseguir un(a) asistente/ayudante/esclavo pero sé que no sería lo mismo, mala frase mía “nada mejor que como lo haces tú mismo”. Si la riego, la riego yo, me enojo conmigo y me evito problemas.
Pero por nada cambiaría mi vida. Prefiero acostarme en la madrugada que estar sin hacer nada.

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